viernes, 7 de abril de 2023

DE HORAS Y BANDONEÓN


 

Tu bandoneón, Rubén

dice la verdad de todas las cosas

tu bandoneón, Rubén, cada tardecita

(cuando

baja

el

sol)

en un recodo de la estación de Temperley

 

Cuando tu pie, Rubén, marca los compases

hace temblar el puente peatonal

y cambiar las luces de los semáforos

para sorpresa de los conductores y los banderilleros

 

ahí pasa un tren A EZEIZA,

ahí uno A ALEJANDRO KORN,

aquel se va parA CONSTITUCIÓN

y aquel otro parA HAEDO

 

Las mejores piernas del sur

ves bajar los escalones, Rubén,

recuerdo de aquel tiempo en que te jugabas entero

y una milonga bien tocada hacía la diferencia

tiempos en que los puchos se consumían más lentamente

¡Quién pudiera volver atrás el reloj!

 

ahí pasa un tren A VARELA,

ahí uno A TROILO,

aquel se va parA GOYENECHE

y aquel otro parA DONDE QUIERAS

 

Hay de aquellos que no te vean, Rubén

hay de aquellos que no te dejen un billete con una reverencia

(recibiendo de tu parte un graciӕrmano)

hay de aquellos que no te oigan, Rubén

pobre de aquellos

no comprenderán nunca el hueso de sus penurias


Foto: Juan Dias Fotografía
Génesis o trasfondo de este poema:
https://auno.org.ar/el-dia-que-temperley-fue-un-bandoneon

No hay comentarios:

Publicar un comentario

"Yo no te pido que me bajes una estrella azul
solo te pido que mi espacio llenes con tu luz":